We left two and a half weeks ago from home to spend the holiday season in Canada with Alan's daughters and to continue on to South Asia. After our exploration in March-April, new questions arose which were crucial in shaping this adventure.Transport, regulations in each country, border conflicts, climate windows, population density, historic-cultural diversity, and the immense wealth of the territory made our planning exercise a significant challenge.
Several choices make this trip very different:
We will not have a vehicle in which to live, which implies several considerations; we will use local transport, trains, rented cars, and planes to move between countries. Apparently, the options are extensive, and we will need to learn the negotiation factors to establish fair agreements and avoid overcharges.
The food is delicious, and we enjoy it, but we will not often have the opportunity to cook, which means that our minds and bodies will have to adapt to a new array of options, foods, and combinations with which we are unfamiliar. For now, it is clear that avoiding street food is key.
We will have to be much lighter and more mobile, so we will travel with only small backpacks and essential resources.
We organised the route based on climate windows, aiming to be in different areas and countries during times of low rainfall and moderate temperatures. However, according to the climate characteristics of each place, we will need to adapt our plans.
We will be in all temperature environments, so our clothing will need to be suitable for a wide range of temperatures, quick-drying, and lightweight.
Given the uncertainty regarding transport, the base case plan is made at a higher level; we have defined sectors and the main issues or points of interest, and we will need to define more details along the route.
Weight is a critical element, so we have minimised the photographic and technological support equipment to the essentials.
We will need to discover how to manage transactions to reduce cash usage, as many commercial establishments and digital wallets do not allow the use of international credit cards, and it seems that it is not possible as non-residents to open a bank account.
Our major decisions were made early in the second semester, including packing trials to estimate volume; this alleviated some pressure before departure. However, the workload made the final weeks feel like a real marathon, intensifying when the countdown began two weeks prior to our departure.
With a recharged heart in both Colombia and Canada, we flew from Vancouver to Mumbai, with a connection in Delhi, it was a 15-hour flight; a mixture of sometimes contradictory emotions accompanied our departure, but the aromas of the food, the music, and the scenes of the movies served as a transition effectively and after the long flight arriving was a pleasure.
Alan & Marce
En español
Salimos hace dos semanas y media de casa para pasar las fiestas en Canadá con las hijas de Alan y continuar hacia Asia del Sur. Después de nuestra exploración en marzo-abril, surgieron nuevas preguntas que fueron determinantes para darle forma a esta aventura.
El transporte, las regulaciones en cada país, los conflictos fronterizos, las ventanas climáticas, la densidad poblacional, la diversidad histórico-cultural y la inmensa riqueza del territorio hicieron que nuestro ejercicio de planificación se convirtiera en un gran desafío.
Varias elecciones hacen que este viaje sea muy diferente:
No contaremos con un vehículo para vivir, lo que implica varias consideraciones; usaremos transporte local, trenes, autos rentados y aviones para trasladarnos entre los países. Al parecer, la oferta es extensa, y tendremos que aprender los factores de negociación para establecer acuerdos justos y evitar sobrecobros.
La comida es deliciosa y nos gusta, pero no tendremos la oportunidad de cocinar, lo que significa que nuestra mente y cuerpo deberán aprender a funcionar con una nueva carta de opciones, alimentos y mezclas que no conocemos. Por ahora, está claro que evitar la comida en la calle es clave.
Tendremos que ser mucho más livianos y móviles, así que viajaremos con solo morrales pequeños y con los recursos esenciales.
Organizamos la ruta en función de las ventanas climáticas, buscando estar en las diferentes áreas y países en momentos de bajas lluvias y temperaturas moderadas. Sin embargo, de acuerdo con las características del clima en cada lugar, tendremos que adaptar los planes y el alcance.
Estaremos en todos los pisos térmicos, así que nuestra ropa tendrá que ser adecuada para una alta diversidad de temperaturas, de secado rápido y liviana.
Dada la incertidumbre sobre el transporte, el caso base está elaborado a un nivel más general; hemos definido sectores y los principales asuntos o sitios de interés, y tendremos que ir definiendo más detalles en la ruta.
El peso es un elemento crítico, por lo que hemos reducido al mínimo necesario el equipo de fotografía y tecnología de soporte.
Tendremos que descubrir cómo manejar las transacciones para minimizar el uso de efectivo, ya que muchos locales comerciales y billeteras digitales no permiten el uso de tarjetas de crédito internacionales, y parece que no es posible abrir una cuenta siendo no residentes.
Nuestras decisiones más importantes se tomaron a principios del segundo semestre, incluyendo pruebas de empaque para estimar el volumen; esto redujo las presiones sobre la salida. Sin embargo, las cargas de trabajo hicieron que las últimas semanas se sintieran como una verdadera maratón, que se intensificó cuando comenzó la cuenta regresiva, dos semanas antes de nuestra partida.
Con el corazón recargado tanto en Colombia como en Canadá, volamos de Vancouver a Mumbai, con conexión en Delhi, fue un vuelo de 15 horas, una mezcla de emociones algunas veces contradictorias acompañaron nuestra salida, pero los aromas de la comida, la música y las escenas de las películas sirvieron de transición efectivamente y después del largo vuelo llegar fue todo un placer.
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